
Procter & Gamble anuncia recorte de 7,000 empleos y salida de marcas en mercados clave
Ante un panorama global incierto, la multinacional estadounidense implementará una reestructuración de dos años que incluye despidos y abandono de productos en ciertas regiones.
Procter & Gamble (P&G), la mayor empresa de bienes de consumo del mundo, ha anunciado un agresivo plan de reestructuración que contempla la eliminación de 7,000 puestos de trabajo en los próximos dos años. La medida busca enfrentar la creciente volatilidad del mercado y las presiones arancelarias que han afectado su rentabilidad y operaciones a nivel global.
El recorte, que representa alrededor del 6% de su plantilla actual, forma parte de una estrategia para optimizar la estructura organizacional, eliminar marcas con bajo rendimiento y concentrarse en sus líneas más rentables como Tide, Pampers y Old Spice. Según P&G, los ajustes ayudarán a “simplificar los equipos, ampliar responsabilidades y liberar recursos clave”.
Durante una conferencia organizada por Deutsche Bank en París, altos ejecutivos de la compañía —incluyendo al director financiero Andre Schulten y al jefe de operaciones Shailesh Jejurikar— señalaron que el entorno geopolítico y económico actual es “impredecible” y está afectando el comportamiento del consumidor a escala global.
Como parte del plan, la empresa también dejará de operar en determinadas categorías y mercados. En años recientes, P&G ya había cerrado operaciones en Argentina, ajustado su presencia en Nigeria y vendido marcas como Vidal Sassoon en China, además de otras en Latinoamérica y Europa.
Los directivos estiman que la reestructuración generará costos de entre 1,000 y 1,600 millones de dólares antes de impuestos durante el periodo, siendo que una cuarta parte de esos cargos no implicará salidas de efectivo. La empresa también advirtió que espera un impacto adicional de 600 millones de dólares para su año fiscal 2026, como consecuencia de los aranceles comerciales.
En respuesta, P&G ha elevado precios en algunos productos y planea seguir ajustando costos para proteger sus márgenes. A pesar del anuncio, las acciones de la compañía registraron una leve baja del 1% y su valor bursátil se ha mantenido prácticamente estable en los últimos 12 meses.
El entorno actual, caracterizado por las secuelas de la guerra comercial iniciada bajo la administración Trump, ha llevado a muchas empresas a reformular sus estrategias. Según estimaciones de Reuters, las tarifas han costado a las compañías al menos 34 mil millones de dólares en ventas perdidas y gastos adicionales.
P&G produce aproximadamente el 90% de lo que vende dentro de Estados Unidos, pero aún depende de importaciones desde China para materias primas y productos terminados, lo que agrava su exposición a los cambios comerciales.
Fuente: Reuters
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