Podrían caer aún más por la espiral de nuevas infecciones de covid-19
Las ventas al por menor en Estados Unidos aumentaron menos de lo esperado en octubre y podrían desacelerarse aún más por la espiral de nuevas infecciones de covid-19 y la disminución de los ingresos familiares, ya que millones de estadounidenses desempleados han perdido el apoyo financiero del gobierno.
Si bien otros datos mostraron que la producción en las fábricas se aceleró en octubre, la producción se mantuvo muy por debajo de su nivel prepandémico y el brote sin control de coronavirus podría afectar la producción. La crisis de salud y la frágil economía son los principales desafíos que enfrenta el presidente electo Joe Biden cuando asuma en enero.
Biden instó al Congreso a unirse y aprobar otro paquete de ayuda para la pandemia. Es poco probable que esto suceda antes de que preste juramento el 20 de enero, lo que ejercerá presión sobre la Reserva Federal para inyectar más dinero a la economía.
Las ventas minoristas aumentaron un 0.3% el mes pasado, dijo el Departamento de Comercio. Los datos de septiembre fueron revisados a la baja para mostrar que las ventas subieron un 1.6% en vez de un 1.9%, como se había informado. Los economistas encuestados por Reuters habían pronosticado que las ventas al por menor ganarían un 0.5% en octubre.
Excluyendo los automóviles, la gasolina, los materiales de construcción y los servicios de comida, las ventas al por menor subieron un 0.1% después de un aumento revisado a la baja del 0.9% en septiembre.
Las llamadas ventas al por menor subyacentes se corresponden más estrechamente con el componente de gasto del consumidor del producto interno bruto. Antes, se estimaba que habían aumentado un 1.4% en septiembre.
Los nuevos casos diarios de coronavirus han superado los 100,000 desde principios de este mes, elevando el número de infecciones en los Estados Unidos por encima de los 11 millones, según un recuento de Reuters. Algunos gobiernos estatales y locales han impuesto nuevas restricciones a las empresas.
Las restricciones y el hecho de que los consumidores eviten los lugares concurridos como bares y restaurantes podrían reducir el gasto y desencadenar otra ola de despidos, lo que reduciría aún más los ingresos tras la pérdida de un subsidio de desempleo semanal del gobierno.
El suplemento, que formaba parte de más de 3 billones de dólares en alivio del coronavirus del gobierno, ha caducado para millones de trabajadores desempleados y subempleados. Millones más perderán sus beneficios el próximo mes cuando expire un programa financiado por el gobierno para los trabajadores autónomos, los trabajadores de espectáculos y otros que no califican para los programas estatales de desempleo.
Otro programa del gobierno que proporciona beneficios a las personas que han agotado sus seis meses de elegibilidad para la ayuda estatal también caducará a finales de diciembre.
Los economistas esperan un crecimiento moderado de las ventas al por menor para el resto del año, lo que contribuirá a un crecimiento económico más lento después de un repunte histórico del producto interno bruto en el tercer trimestre.
Un estudio de JPMorgan sobre los titulares de tarjetas de crédito y débito mostró una amplia disminución del gasto hasta el 9 de noviembre, con grandes caídas en los estados donde el covid-19 se está extendiendo más rápidamente.
Las estimaciones de crecimiento para el cuarto trimestre están por debajo de una tasa anualizada del 5 por ciento. La economía creció a una tasa del 33.1% en el trimestre de julio-septiembre después de contraerse a un ritmo del 31.4% en el segundo trimestre, la baja más profunda desde que el gobierno comenzó a llevar registros en 1947.
Fuente: Reuters
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