ANPEC rechaza impuesto a refrescos

Más de un millón 200 mil cartas firmadas por los propietarios de pequeños comercios (tienditas), y presentadas ante notario público, fueron entregadas en la Cámara de Diputados en rechazo a un impuesto a las bebidas azucaradas.

Derivado de un sondeo realizado con 1,278 entrevistas directas, entre mayores de 18 años en viviendas de Monterrey, Guadalajara y cinco delegaciones del Distrito Federal, la Asociación Nacional de Pequeños Comerciantes Plutarco Elías Calles (ANPEC), confirmó que la estrategia del gobierno federal de aumentar los impuestos no se acepta en general, ya que el 92 por ciento de los consumidores que acuden a pequeños comercios está en desacuerdo con los impuestos propuestos en la Reforma Hacendaria 2013 y un 65,3 % está en contra de gravar con una tasa adicional el consumo de refrescos.

A lo que, el presidente de la asociación, Cuauhtémoc Rivera, en comparecencia ante la Comisión de Hacienda de la Cámara de Diputados, señaló que un nuevo impuesto a los refrescos impactaría en cientos de miles de familias mexicanas que tienen como único sustento este pequeño comercio o tiendita, pues este producto representa el 30% de sus ventas directas e impulsa de manera indirecta el 70% de sus ventas totales, siendo el principal producto “gancho” de su inventario. “La caída de la venta del refresco pondría al borde de la quiebra y obligaría a cerrar a una gran cantidad de los 750 mil puntos de venta que operan en el país, dejando a miles sin trabajo y a sus familias sin sustento”. “Un impuesto así, sólo tendría repercusiones económicas, políticas y sociales”, recalcó.

Dando voz al pequeño comercio, Cuauhtémoc Rivera se dirigió a los diputados: “Queremos exponer nuestra versión y argumentos del por qué un impuesto adicional a las llamadas “bebidas azucaradas” no resuelve el problema de la obesidad en el país; este problema es mucho más complejo y si todo el mundo sabe que su origen es multifactorial, el sentido común nos dice que la solución debe ser “multisectorial”.

Agregó que la obesidad y la diabetes que padece una gran parte de la población obedecen a malos hábitos alimenticios y al sedentarismo al que estamos sumergidos, estas enfermedades no pueden ser atribuidas al consumo de refresco solamente.

En su discurso, Rivera recordó a los legisladores que los pequeños comercios son formas de autoempleo que simbolizan el más puro espíritu emprendedor de los mexicanos y que atentar contra estas formas de autoempleo es un error mayúsculo, porque esta oportunidad laboral fue creada con el esfuerzo y dinero del propio ciudadano. Cerrarles el paso, continuó el líder de Anpec, sería condenar a más de 5 millones de mexicanos al desempleo, ya que las tienditas son la última frontera entre el comercio legal y el ilegal. Por ello, antes que debilitarles es menester del Estado y sus poderes consensuar políticas públicas efectivas para fortalecer a esta cadena de abasto tradicional y su labor trascendental de servicio y abasto a la comunidad.

Previo a su visita al Congreso, la Anpec manifestó en conferencia de prensa, que en la Reforma Hacendaria incluye el IVA aplicable a colegiaturas, hipotecas, alquiler e impuesto especial a bebidas azucaradas, así como la eliminación de los Repecos (Régimen a pequeños contribuyentes), impuestos que pagará la misma base de contribuyentes cautivos.

“De aprobarse el impuesto especial al refresco y eliminarse los Repecos desaparecerán miles de tienditas, aumentará el desempleo y muchas personas que subsisten con legalidad y honestidad serán empujadas a la informalidad”, puntualizó Rivera.

El líder de los pequeños comerciantes, concluyó expresando que, el pequeño comercio siempre ha estado en la formalidad, “queremos que entiendan nuestra situación socioeconómica y (recibir) un trato justo. Estamos con y por México tan es así que con nuestros propios recursos nos hemos auto empleado para formar parte del desarrollo nacional, nunca ser un obstáculo”.