Italia aprueba el primer presupuesto de Meloni

El gobierno italiano obtuvo con holgura un voto de confianza en el Senado sobre su presupuesto expansivo para el 2023, al obtener la aprobación final del Parlamento pocos días antes de la fecha límite de fin de año.

El gobierno italiano obtuvo con holgura un voto de confianza en el Senado sobre su presupuesto expansivo para el 2023, al obtener la aprobación final del Parlamento pocos días antes de la fecha límite de fin de año.
El primer presupuesto de la primera ministra, Giorgia Meloni, eleva el déficit del próximo año a 4.5% del Producto Interno Bruto, frente al 3.4% previsto en septiembre, y asigna más de 21,000 millones de euros en exenciones fiscales y bonificaciones para ayudar a empresas y hogares a hacer frente a la crisis energética.

El Ministro de Economía, Giancarlo Giorgetti, calificó la aprobación del presupuesto de “misión cumplida”, donde afirmó que el paquete se ganó la confianza de los mercados, las instituciones europeas y, por último, del Parlamento.

Los gobiernos italianos suelen recurrir a las votaciones de confianza para truncar el debate sobre las enmiendas y sacar adelante la legislación. Si se pierde una votación de este tipo, el gobierno debe dimitir, pero Meloni, con su amplia mayoría parlamentaria, no corría ese riesgo.

También se utilizó un voto de confianza para forzar la aprobación del presupuesto en la Cámara de Diputados la semana pasada.
Los partidos de la oposición han acusado a la coalición gobernante de derechas de no dar tiempo suficiente al Parlamento para revisar el proyecto de ley, presentado por Meloni en noviembre, un mes después de su toma de posesión.

El gobierno rebate que no tenía alternativa porque las elecciones nacionales celebradas en septiembre redujeron drásticamente el periodo utilizado para elaborar y debatir el paquete.
Meloni arremetió contra las instituciones financieras de la UE, donde pidió al Banco Central Europeo (BCE) que sea más cuidadoso en su forma de comunicar además de decir que el fondo de rescate de la zona euro no sirve para nada.

Fuente: Reuters