La volatilidad del peso genera incertidumbre para el sector industrial mexicano

El tipo de cambio se ve presionado por tensiones geopolíticas y la cancelación de una reunión clave entre México y EE. UU.; industriales advierten posibles efectos en cadenas de suministro y costos de importación.

El peso mexicano se ubicó este martes en 18.9500 unidades por dólar, tras una caída del 0.7 %, su peor desempeño diario frente a otras monedas de América Latina. Esta depreciación genera preocupaciones en el sector industrial mexicano, que depende en gran medida de insumos importados y de la estabilidad cambiaria para sus operaciones.

El debilitamiento de la moneda se da en un contexto de crecientes tensiones entre Irán e Israel, que han provocado movimientos bruscos en los mercados financieros globales. La situación se agravó luego de que el presidente estadounidense, Donald Trump, abandonara de forma anticipada la cumbre del G7, cancelando una reunión con la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, en la que se preveía discutir temas de alto impacto para el sector productivo, como el comercio bilateral, la política fronteriza y un posible impuesto a las remesas.

Para la industria, esta cancelación representa una oportunidad perdida para alinear estrategias y reducir riesgos logísticos, especialmente en sectores como el automotriz, electrónico y manufacturero, altamente expuestos al entorno internacional.

Además del frente geopolítico, la expectativa por el anuncio de política monetaria de la Reserva Federal de Estados Unidos (FED) también contribuyó al ajuste del tipo de cambio. Aunque se espera que no haya cambios en las tasas de interés, los industriales mexicanos anticipan volatilidad adicional en precios de materias primas, energéticos y componentes electrónicos, que ya enfrentan presiones inflacionarias.

Organismos empresariales han señalado la necesidad de monitorear de cerca el comportamiento del tipo de cambio para ajustar estrategias de importación, renegociar contratos en dólares y prever escenarios de mayor riesgo cambiario durante el segundo semestre del año.

Fuente: Reuters