Mexicanos en la búsqueda por salvar vidas

Ya tienen prototipos finales de B-Heart, la pulsera que mide la temperatura, la oxigenación de la sangre y el ritmo cardiaco de bebés

Se trata de 13 jóvenes que no superan los 25 años y que, divididos en tres grupos de investigación, trabajan desde el "iLab Veracruz", un centro gubernamental de innovación que recluta talento egresado sobre todo de instituciones públicas de educación superior.

Las principales características de los dispositivos desarrollados por los jóvenes -algunos de zonas indígenas y rurales del estado de Veracruz- es su bajo costo y las innovaciones tecnológicas, que los convierten en únicos o diferentes a otros productos ya existentes en EU y Europa.

La idea de la pulsera para recién nacidos surgió apenas hace cuatro meses, cuando cinco jóvenes egresados de dos institutos tecnológicos escucharon a uno sus compañeros, que se estrenaba como papá, quejarse de no saber cuándo estaba enfermo su bebé.

Jessica Hernández, Noé Santos, Omar Barrón, Alejandro Lagos y Ulises Carreto ya tienen los prototipos finales de B-Heart, la pulsera que mide la temperatura, la oxigenación de la sangre y el ritmo cardiaco de bebés, y se enlaza a una aplicación para móviles con plataformas Android e iOS.

Si consiguen la financiación, en ocho meses a más tardar sacarán al mercado esta pulsera de material flexible e impermeable, que contiene un sensor de reflexión, instrumentos médicos, controlador independiente y un software.

"Cuando hay una variación irregular en cualquiera de los signos vitales, manda dos alertas", una cuando "hay variación leve" y la otra cuando se trata de una "emergencia", explica Jessica.

Las alertas se mandan vía bluetooth hasta una distancia de un kilómetro o por mensaje escrito a dispositivos móviles en cualquier parte del mundo.

La pulsera, cuyo costo puede rondar los 2,500 pesos (unos 185 dólares), es de dos centímetros y se amolda a la muñeca del bebé, además "es impermeable y cuenta con una batería recargable para más de una semana y con eso el niño siempre estará protegido, así coma o se bañe", añade.

El segundo equipo de investigación fue "la burla de todos" porque, según cuenta Marisol Matus, una de sus primeras ideas fue crear un expendedor de hot dogs.

Sin embargo, solo fue la puntilla para que el grupo, integrado también por Francisco Lagos, Alejandro Osorio Ramos y Daniel Alejandro Nieto, crearan SunnyGo, una pulsera única en el mundo que mide el tiempo de exposición solar y emite alertas para que sus usuarios se retiren del sol o se coloquen nuevamente bloqueadores.

"El cáncer de melanoma es el de los que no se toma en cuenta y las cifras siguen elevadas. La Asociación Americana contra el Cáncer señala que 9,100 personas morirán de cáncer (...) y las personas no se cuidan", explica la joven.

Por ello, fabricaron sensores que detectan los seis principales tipos de piel de las personas, tiempo de exposición al sol y cuando un bloqueador solar deja de funcionar.

En Europa, su competencia más cercana son unas pulseras desechables que se les aplica bloqueador y cambian de color para avisar que su efecto terminó. Un paquete de siete se vende a 177 euros (unos 225 dólares).

En tanto, el SunnyGo es completamente electrónico, tiene pila recargable y su costo oscilará entre los 650 y 1,000 pesos (48 y 75 dólares), señalan sus diseñadores.

El tercer dispositivo desarrollado por cuatro jóvenes mexicanos, Amadeus Portes Martínez, Daniel Álvarez, Cesar Iván Ramos y Javier Rayón, es una funda para los cinturones de seguridad de los vehículos que impedirá que los conductores se duerman al volante.

Si bien este dispositivo ya está disponible en el mercado para "las marcas de autos de lujo como el Audi", el desarrollado por los mexicanos es de bajo costo y "podrá ser utilizado en cualquier unidad", explicó Portes, que estimó el precio en 2.500 pesos (185 dólares).

La funda más sencilla cuenta con una minicomputadora conectada a una cámara web, un algoritmo genético que detectará patrones de movimiento y aprenderá de los mismos, un fonocardiograma para detectar las pulsaciones del corazón y un algoritmo que bloqueará el ruido del automóvil.

Si bien está diseñado para cualquier vehículo, los jóvenes quieren introducirlo al sector de los camiones de carga.

El dispositivo más avanzado, que sólo se podrá usar en unidades con computadoras integradas, disminuye la velocidad, pone las luces intermitentes y acciona el claxón en caso de que el conductor sufra un desmayo o un paro cardiaco.

"La aplicación que desarrollamos avisará a aseguradoras, familiares y servicios médicos", dice Portes orgulloso.

Fuente: EFE