Inició operaciones Pemex Transformación Industrial

La fusión entre las áreas de refinación, gas y petroquímica ha sido la más grande del sector energético en la historia del país

El director general de Petróleos Mexicanos (Pemex), Emilio Lozoya, anunció el inicio de operaciones de la subsidiaria Pemex Transformación Industrial, la cual tiene como finalidad generar valor y rentabilidad petrolera para el Estado.

En un comunicado, señaló que la fusión que dio origen a esta empresa (entre las áreas de refinación, gas y petroquímica) es la más grande del sector energético en la historia del país, y fue conseguida en poco más de seis meses, cuando se había estimado en año y medio.

El funcionario agregó que si bien durante las últimas décadas se dejó de invertir en esta parte de la cadena de valor, ya se están concretando inversiones en logística y algunas plantas con resultados alentadores, para hacer de Pemex una empresa más competitiva, moderna y eficiente.

Pemex Transformación Industrial tiene por objetivo actividades de refinación, transformación, procesamiento, importación, exportación, comercialización, expendio al público, elaboración y venta de hidrocarburos, gas natural y petroquímicos.

Para ello, podrá realizar actividades como almacenamiento, transporte y distribución; crear empresas filiales, así como participar en toda clase de concursos y licitaciones públicas o privadas, tanto nacionales como internacionales, entre otras.

El director general de la nueva subsidiaria, Alejandro Martínez Sibaja, informó que las actividades en todas las áreas de la empresa seguirán estrategias como una operación segura y confiable, con indicadores económicos y de procesos.

Una estrategia y una ejecución compartida en corresponsabilidad con la dirección, sujetas a rendición de cuentas, y un programa que garantice su participación en la solución de los problemas.

Martínez Sibaja explicó que Pemex Transformación Industrial se orientará a los mercados rentables y dejará a un lado la visión volumétrica, pues no serán medidos por los barriles de petróleo crudo procesado, sino por el valor que genere a Pemex.

Para lograr mayor eficiencia en los costos y maximizar el valor del negocio, destacó, se requiere de un profundo cambio cultural, de un plan de trabajo que enfatice la seguridad y la confiabilidad de la producción, así como de una visión de mercado que guíe esas actividades.

Por lo que el reto inmediato es incrementar la eficiencia operativa y estabilizar la operación, mientras que a mediano plazo se buscará capturar el máximo valor que ofrece el mercado, así como fortalecer y mejorar la infraestructura para producir mejores combustibles, apuntó.